El precio de la electricidad no para de subir en los últimos meses alcanzando cifras históricas, lo que preocupa a los ciudadanos, que se enfrentan al pago de facturas cada vez más elevadas. En plena vorágine de subidas del coste de la luz, muchos particulares han comenzado a mirar hacia el sol buscando una alternativa que les permita ahorrar en su factura. Las ENERGÍAS RENOVABLES son una de las opciones que se plantean como mejor solución, entre las que destaca la energía solar. Por lo que no es de extrañar que cada vez haya más personas interesadas, sobre todo las que son propietarias de viviendas unifamiliares.

No debemos olvidar que desde Europa está habiendo un interés en impulsar el aumento de las energías renovables como fuente esencial de energía. Los compromisos firmados por todos los países de la UE para el año 2030 incluyen la reducción de un 55% de las emisiones de gases de efecto invernadero, utilizar al menos el 32% de energías renovables en el consumo de energía y un 32,5% de mejora de la eficiencia energética. Esto implica la minimización del uso de combustibles fósiles como el carbón, el fuel o el gas para la generación de electricidad, hasta su futura extinción.

Para ello, el pasado 20 de junio de 2021 se aprobó el Real Decreto 477/2021 por el que se aprueba la concesión directa a las comunidades autónomas de ayudas para la ejecución de diversos programas de incentivos ligados al autoconsumo y al almacenamiento con fuentes de energía renovable. Según el tipo de Programa, un propietario de una vivienda unifamiliar podría ahorrarse entre 300 y 600€ por kWp instalado.

A todo esto hay que sumarle que la energía fotovoltaica ha ido reduciendo costes en los últimos años, por lo que instalar placas solares fotovoltaicas es menos costoso en la actualidad que hace unos años. Además, el precio de la energía solar no cambia mensualmente, sino que se invierte en un primer momento para realizar la instalación y ese dinero se va recuperando mes a mes. La durabilidad de las placas puede alcanzar hasta los 30 años, teniendo sólo que realizar un mantenimiento periódico.

El mejor reclamo que puede tener la energía solar en este momento es que se puede conseguir un GRAN AHORRO E INDEPENDENCIA de las grandes compañías energéticas. Y es que la decisión de instalar placas solares lleva consigo un gran número de ventajas:

• Ahorro en el consumo de electricidad de la red. El autoconsumo logra que esa energía que generamos con las placas solares ayude a ahorrar entre un 50-70% del gasto eléctrico. Se consume lo que se genera.

• Ayudas y subvenciones. Impulsadas desde la UE, de aquí al 2023 está abierto el plazo para pedir estas ayudas para autoconsumo y energías renovables. Con ellas un particular puede ahorrarse la mitad de la instalación y, además, dependiendo de cada comunidad autónoma, se pueden obtener beneficios fiscales como la reducción del 50% del IBI[i] o hasta el 95% del ICIO[ii].

• Compromiso con el medio ambiente. Una instalación fotovoltaica en una vivienda unifamiliar puede reducir hasta un 45% el CO2 que se expulsa a la atmósfera e incluso más si se añaden baterías.

• Inversión rentable. Si bien es cierto que el desembolso inicial puede ser elevado, en poco tiempo se rentabiliza, convirtiéndose en una buena inversión a la hora de la compra-venta de la vivienda.

Desconociendo cuándo se estabilizará el precio de la electricidad y sabiendo que desde las organizaciones europeas y españolas se está dando un paso adelante en el tema de las energías renovables, es el momento IDÓNEO para pasarse a la energía solar.

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[i] Impuesto sobre Bienes Inmuebles

[ii] Impuesto sobre Instalaciones, Construcciones y Obras